Según parece, Kanye West habría estallado de nervios después de la presentación de su última colección de ropa en New York Fashion Week. El rapero se habría enojado porque las cosas no salieron como esperaba y habría despedido de muy mala manera a las 30 personas que integran su equipo de trabajo. Una fuente del portal de noticias Page Six asegura que después del desfile Kanye apagó su teléfono para que no pudieran localizarlo.
Este proyecto había sido tan importante para Kanye, que había dedicado mucho tiempo y empeño en organizarlo y dar lo mejor para que saliera bien. De modo que la decepción fue mayor cuando el evento no resultó como lo esperaba. Después del evento decidió refugiarse en sí mismo para reconfigurar las cosas y lo expresó de esta manera en Twitter: “Me he deshecho de mi celular para tener una atmósfera adecuada para crear”, dice su tweet.
Si bien su gira musical está saliendo muy bien y Kanye tiene con qué consolarse, anteriormente ya había protagonizado escándalos en su faceta en la indumentaria. Este verano, a raíz de la mala organización y las nefastas condiciones a las que habían sido sometidas, las modelos que presentaron su colección de ropa se desmayaron sobre la pasarela.
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